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Ahora, por presa Ucrania vive catástrofe ambiental

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Las autoridades de Ucrania llevaron agua potable a las áreas inundadas por el derrumbe de la presa de Nova Kajovka, mientras manejan el creciente desastre humanitario y ecológico a lo largo del río Dnieper, que forma parte del frente en la guerra desde hace 15 meses.

El colapso de la represa hidroeléctrica y el vaciado de su embalse en el río se sumaron a la miseria que la región ha sufrido durante más de un año debido a los ataques de artillería y misiles.

Decenas de miles de personas se han visto privadas de agua potable, muchas están sin hogar, las cosechas están arruinadas, las minas terrestres han sido desplazadas y el escenario está listo para una escasez de electricidad a largo plazo.

Algunos residentes de las áreas ocupadas por los rusos que se han visto afectadas por las inundaciones se quejaron de que la ayuda tardó en llegar, con algunos varados en los techos y calles transitables sólo por bote en escenas más parecidas a desastres naturales que a guerras. Otros se negaron a irse.

De acuerdo con el primer informe de víctimas del desastre, se reportaron tres personas fallecidas. Además, al menos cuatro mil personas han sido evacuadas de los lados del río controlados por Rusia y Ucrania, aunque las autoridades aún no han revelado la verdadera escala del desastre en el área afectada, que albergaba a más de 60 mil personas. Las autoridades designadas por Rusia en las zonas ocupadas de la región de Jerson dieron a conocer que hay más de 15 mil viviendas inundadas.

En Oleshky, la mayoría de las tropas rusas huyeron después de la catástrofe. El alcalde Yevhen Ryschuk, quien abandonó la ciudad después de que las fuerzas de Moscú tomaron el control el año pasado, informó que 90% de la localidad está inundado, no tiene electricidad, agua potable ni alimentos y enfrenta una posible contaminación de aguas subterráneas.

La presa y el embalse, esenciales para el agua dulce y el riego de una gran área del sur de Ucrania, se encuentran en la región de Jerson, que Moscú anexó ilegalmente en septiembre y ha ocupado durante el último año. El embalse también es fundamental para el suministro de agua a Crimea, que Rusia anexó en el 2014.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se reunió con funcionarios sobre cómo proporcionar agua potable a los residentes, así como evaluar los daños de lo que llamó “un crimen de ecocidio” y “un ataque al medio ambiente provocado por el hombre, después de que la naturaleza tendrá que recuperar durante décadas”.

En un discurso en video, el mandatario ucraniano señaló que era imposible predecir cuántas personas morirían en las áreas ocupadas por Rusia debido a las inundaciones, así como cuántos productos químicos y derivados del petróleo almacenados en las áreas afectadas terminarán en los ríos o el mar, e instó a una “reacción clara y rápida del mundo” para apoyar a las víctimas.

“La situación en las partes ocupadas de la región de Jerson es absolutamente catastrófica. Los ocupantes simplemente están abandonando a la gente en condiciones espantosas. No queda ayuda, sin agua, en los techos de las casas en las comunidades sumergidas”, expresó.

En su visita a la ciudad de Jerson, que se encuentra bajo las aguas de la represa, el viceministro Oleksandr Kubrakov señaló que más de 80 asentamientos se vieron afectados por el desastre y que las inundaciones liberaron sustancias químicas y bacterias infecciosas en el agua.

Asimismo, el gobierno de Kiev advirtió sobre el peligro de las minas flotantes desenterradas por las inundaciones, además de alertar que más de 40 mil personas están en riesgo.

Por su parte, el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, declaró que la situación en torno a la central hidroeléctrica de Kajovka es grave, pero instó a no entrar en pánico.

“No queremos avivar el fuego ni crear pánico porque no hay motivo para ello. Al mismo tiempo, es una situación grave. Así que no queremos restarle importancia dando a entender que no hay ningún problema. Sí, hay un problema, porque hay una disminución constante del nivel del agua”, declaró Grossi.

A su vez, alertó que la destrucción del embalse puede privar a la central nuclear de Zaporiyia de su capacidad de refrigeración a medio plazo, provocando importantes daños en los reactores.

“Si perdemos la capacidad de refrigeración, puede producirse una fusión, puede haber consecuencias radiológicas, además de que los propios reactores podrían resultar dañados de forma muy significativa, aparte de las consecuencias medioambientales que podrían producirse”, adelantó.

El directivo destacó que la OIEA supervisa la disminución del nivel del agua en el embalse de Kajovka y desarrollará medidas de respuesta para mitigar las consecuencias para la central nuclear, además de reforzar su misión en la planta.

Representantes de la ONU visitaron la zona del desastre y evaluaron que es probable que la situación empeore en las próximas horas, afirmó Stéphane Dujarric, portavoz del organismo. Durante una rueda de prensa, manifestó que los niveles del agua siguen en aumento, mientras que más pueblos y ciudades se están inundando.

source https://www.razon.com.mx/mundo/presa-ucrania-vive-catastrofe-ambiental-531506

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